La Diócesis de Tarazona es la encargada de organizar este año el Encuentro Regional de Catequistas de Aragón que va a tener lugar el próximo sábado, 22 de octubre, en Calatayud. Un encuentro que, como nos cuenta el responsable del Secretariado de Catequesis de la Diócesis, el sacerdote Justo Sánchez Muelas, «se suele hacer a principio de curso, encargándose cada año una diócesis aragonesa».
«Se trata de una jornada de convivencia festiva, lúdica más que de formación, en la que se pretende que los catequistas de las distintas diócesis se encuentren con otros catequistas que comparten la misma tarea y se incentive el espíritu de eclesialidad, de pertenencia a una gran familia en la que todos trabajamos con la misma ilusión y en la que nos encontramos las mismas dificultades. Y eso hace que no sentirse solo ni aislado dentro de un mundo que veces nos sobrepasa», cuenta el sacerdote.
Los organizadores estiman que participen unos 200 catequistas que van a tener la oportunidad de hacer un recorrido y de conocer la historia de tres templos de Calatayud: la Basílica Colegiata del Santo Sepulcro, San Juan el Real y de la recientemente reabierta Colegiata de Santa María la Mayor.
El encuentro comenzará en el Santo Sepulcro donde se les ofrecerá un pequeño desayuno. En su interior tendrá lugar la bienvenida y se rezará una oración. Tras realizar una visita por la iglesia, los participantes pasarán a San Juan el Real, donde se explicará el significado del cartel de este año del Domingo de la Educación en la Fe, que se celebró el 2 de octubre, y conocerán el templo.
La Colegiata de Santa María será la última parada en la que se celebrará la Eucaristía tras conocer cómo ha sido su rehabilitación y restauración. La misa estará presidida por el obispo de la Diócesis de Tarazona, Mons. Vicente Rebollo, y concelebrada por Mons. Julián Ruiz, obispo de Huesca y Jaca, y responsable de Catequesis de las diócesis aragonesas, junto a los sacerdotes que acudan al encuentro. La jornada finalizará con una comida compartida en un espacio cedido por el Ayuntamiento de Calatayud.
SER CATEQUISTA EN ESTOS TIEMPOS
Uno de los objetivos de este encuentro es que los catequistas compartan sus inquietudes en una jornada lúdica de convivencia porque, tal como señala Justo Sánchez, «es muy difícil ser catequista en estos tiempos ya que, a veces, se trata de nadar a contracorriente y sin el apoyo en muchos casos de la familia que es fundamental. En teoría, el primer lugar de la catequesis tendría que ser la familia y la parroquia ser colaboradora, pero en la mayoría de los casos lo que percibimos es que la única catequesis que se recibe es la de las parroquias y en la familia no se encuentra apoyo o, incluso, se da lo contrario. Y cuesta trabajo porque nos encontramos en un mundo que tampoco ayuda».
Sin embargo, hay lugar para el optimismo puesto que no ha disminuido el número de niños y adolescentes que se apuntan a catequesis tras la pandemia. Según el responsable del Secretariado diocesano de Catequesis de Tarazona, hubo más bajón en los años que coincidieron con un descenso de natalidad por la grave crisis económica en torno a 2008. «En 2019 el número de niños de primera comunión se redujo un 50 por ciento y ahora volvemos a subir. En ese año hubo en San Juan el Real, de dónde soy el párroco, 100 niños que comulgaron, pero solo 50 que se apuntaron a catequesis. Ahora, sin embargo, vamos remontando pues estamos llegando a los 70 niños en catequesis».