En nuestro recorrido por las comunidades de Vida Consagrada de nuestra Diócesis de Tarazona con motivo de la Jornada de la Vida Consagrada, hoy nos detenemos en la de las MM Carmelitas Descalzas de Maluenda para las que el «caminar juntas»es el modo de vivir habitual desde que Santa Teresa comenzó sus Carmelos.
«No existe otro modo sino entrar en lo que ella, Santa Teresa, llama la «escuela de Jesús«, donde la vida en común es el camino de santidad y felicidad de cada una: «determiné hacer eso poquito que era en mí, que es seguir los consejos evangélicos, con toda la perfección que yo pudiese, y procurar que estas poquitas que están aquí hiciesen lo mismo,» (Camino, cap. 1, 1).
y desde ahí «obras quiere el Señor; y que si ves una enferma a quien puedes dar algún alivio, no se te dé nada de perder esa devoción y te compadezcas de ella«; o en el trabajo: «cada una procure trabajar para que coman las demás«; o en el tiempo dedicado a la formación comunitaria: «tan necesario para el alma, como el comer para el cuerpo«; y por supuesto los tiempos dedicados a la recreación y el descanso juntas.
Con este telón de fondo, el Sínodo lo estamos viviendo como un querer del Santo Padre para la Iglesia, y estamos teniendo momentos concretos de formación sobre el sínodo, respondiendo a las cuestiones planteadas mediante los medios modernos de comunicación, pero sobre todo rezando a diario y ofreciendo nuestras vidas por este camino sinodal de la Iglesia en el S. XXI.