Gracias a la solidaridad de los fieles la Diócesis de Tarazona ha podido asistir a más de 8.000 personas en el pasado año 2021. A estos podemos añadir los 290 refugiados ucranianos que han pasado por el Seminario diocesano desde los comienzos de la guerra en este 2022.
Durante el pasado año, la Diócesis de Tarazona ha atendido a 3.650 personas en centros de asistencia a refugiados y emigrantes; se ha prestado ayuda a 2.712 en centros para mitigar la pobreza, 1.300 se han visto beneficiadas por los programas para promover el empleo y 25 han sido las personas atendidas en centros de menores y jóvenes. Además, desde la Diócesis se ha ayudado a 315 mayores, enfermos crónicos y discapacitados. En este apartado, hay que añadir a los adultos y niños que son atendidos en la Misión Diocesana de Cochabamba, a donde la Diócesis de Tarazona destina una cantidad importante de recursos.
En cuanto a la actividad celebrativa, en la Diócesis de Tarazona tuvieron lugar en 2021, 225 bautizos, 450 confirmaciones, 325 primeras comuniones y 32 matrimonios, cifras que han aumentado con respecto al 2020. En ese año hubo 157 bautizos, 175 primeras comuniones, 75 confirmaciones y 21 matrimonios debido a la pandemia, que hizo que este tipo de celebraciones se redujeran de manera importante.
La Diócesis de Tarazona está compuesta por 144 parroquias en las que ejercen su labor pastoral 88 sacerdotes, en ella desarrollan distintas acciones 110 religiosos y religiosas, 33 monjas de clausura viven en cuatro monasterios, cuenta con un seminarista y un diácono permanente y con 225 catequistas que se encargan de enseñar y difundir el Evangelio. Además, 30 misioneros diocesanos desempeñan su actividad evangelizadora por todo el mundo.
Estos son algunos de los datos que se han dado a conocer hoy, miércoles, 2 de noviembre, con motivo de la celebración del Día de la Iglesia Diocesana el próximo domingo, 6 de noviembre, que este año lleva por lema “Gracias por tanto” y que también se recogen en el folleto «Nuestra iglesia», que se edita todos los años y que se pueden encontrar en las parroquias. Un día que, como ha indicado el obispo de Tarazona, Mons. Vicente Rebollo, es “el de los bautizados”, que sirve para “sentirnos más Iglesia, estar orgullosos de formar parte de ella y de nuestra fe que, a su vez, nos ayuda a ser buenas personas y a transformar el mundo y la sociedad”. El prelado ha destacado que uno de los objetivos del Día de la Iglesia Diocesana es “poner al servicio de los demás los ricos dones que Dios nos ha dado y que son nuestro tiempo, nuestros talentos, nuestra oración y nuestro dinero, aportado en la medida de las posibilidades de cada uno”.
D. Vicente Rebollo ha hecho referencia al lema de la Iglesia Diocesana dando las gracias por tanto “amor” que aportan todos aquellos que colaboran con su parroquia y con la Diócesis porque gracias a ellos “podemos caminar “y ser una “Iglesia viva”.
LAS CUENTAS DIOCESANAS
Además de dar a conocer la actividad de la iglesia en Tarazona en sus diferentes facetas, hoy también se han presentado los ingresos y gastos de la Diócesis. “Es una manera de que los fieles sepan qué se hace con los recursos económicos que aportan, cuál es su destino, para qué se emplean. Teniendo este conocimiento, es más fácil que haya más colaboración por parte de todos”, ha indicado el ecónomo diocesano, Luis Jesús Rada, que ha hecho referencia también al impacto de la pandemia en la sociedad y cómo la Diócesis ha intentado paliar esas dificultades gracias, precisamente, a las aportaciones de los fieles.
La diócesis turiasonense gestionó el año pasado 3.102.420, 15 euros. De esa cantidad, el 47, 78 %, procede del Fondo Común Interdiocesano, es decir, de la asignación tributaria y supone 1.483.336,34 euros. La segunda fuente de ingresos son las parroquias, lo que se recauda en ellas gracias a las suscripciones periódicas, al cepillo de las misas y a los estipendios por las celebraciones. Estos ingresos ascienden a 876.743,93 euros. Por otro lado, las aportaciones directas de los fieles suponen un 19,07% de los ingresos, 591.631,52 euros.
En cuanto a gastos, estos ascienden a 3.096.980,72 euros, siendo las acciones pastorales y asistenciales y la retribución al clero las partidas a la que más recursos se destinan: 1.002.182,96 euros a la primera y 921.661,46 euros a la segunda. Las parroquias suponen el 28,46% del gasto.
Luis Jesús Rada ha destacado que las parroquias de la Diócesis de Tarazona son deficitarias, ya que no cubren sus gastos que ascienden a 881.400,71. “De ahí que sea necesario -ha indicado el ecónomo – apelar a la solidaridad de todos los fieles para contribuir tanto al sostenimiento de las parroquias como al de la propia Diócesis para sentirse miembros de una gran familia pero también para llegar a la autofinanciación”. Asimismo recordó la existencia del portal www.donoamiiglesia.es a través del cual se pueden hacer aportaciones a la parroquia que se desee y con la periodicidad que más convenga.
GRACIAS A LA DIÓCESIS DE TARAZONA
Por último, Miguel Taus, uno de los voluntarios que trajo a refugiados ucranianos a Tarazona, ha intervenido para agradecer a la Iglesia de Tarazona “el haber sabido concretar su apoyo a esta necesidad”. “Gracias a esta Diócesis, que ha puesto a su disposición instalaciones, personal y recursos económicos se ha podido atender a 290 personas necesitadas”. Taus ha añadido que sin la ayuda de la Diócesis no hubiera sido posible hacer todo lo que han llevado a cabo hasta ahora con los refugiados.