La hermosa tradición de preparar el Belén los días previos a la Navidad se remonta al año 1223. Cuando San Francisco de Asís, después de su viaje a Tierra Santa, quiso celebrar la memoria del Niño Dios y representar la Natividad. “San Francisco realizó una gran obra evangelizadora con la simplicidad de aquel signo”, escribió el papa Francisco en la carta apostólica Admirabile signum. El nombre del “Belén” proviene de la localidad palestina donde nació Jesús de Nazaret, como evidencian los Evangelios de San Lucas y de San Mateo.
VALOR DEL PESEBRE
El verdadero sentido de la Navidad no está en las reuniones sociales o en los regalos, sino en el signo del pesebre de Belén. Aquel establo humilde donde tuvo lugar el nacimiento de Jesús y, donde se enmarca el gran misterio de la Encarnación del Hijo de Dios.
BELENES ARAGONESES
Este mes navideño regresa a Aragón la tradición de la Ruta del Belén, donde se representa el nacimiento del Niño Jesús. En esta edición participan en el recorrido 19 poblaciones y 24 belenes que se podrán visitar en los diferentes pueblos aragoneses, distribuidos entre Huesca y Zaragoza, desde el 6 de diciembre al 6 de enero de 2022. Consulte más información en www.rutadelbelen.es.
EL BELÉN DEL VATICANO HOMENAJEA A PERÚ
Este año el Nacimiento de la Plaza de San Pedro, Ciudad del Vaticano, viene desde Perú. El pesebre, realizado por la comunidad peruana de Chopcca, un pequeño pueblo de la región andina de Huancavelica, es un homenaje a la cultura y las tradiciones del Perú. Los personajes, de tamaño natural, están vestidos con trajes tradicionales tejidos en la región de Huancavelica.