El Seminario diocesano de Tarazona ya está preparado para recibir a los 60 refugiados ucranianos que llegarán mañana domingo, 13 de marzo, gracias a la buena voluntad de un grupo de voluntarios de la ciudad que se han encargado de traerlos desde Polonia.
Además de los dormitorios, el grupo compuesto por mujeres, niños y adolescentes, va a disponer de dos salas de estar donde poder reunirse, una sala de juegos que se va a habilitar y un comedor para ellos. Asimismo, podrán disfrutar del exterior del Seminario que cuenta con amplias zonas de recreo al aire libre. Todo está preparado para que se encuentren como en casa.
PERNOCTACIÓN EN SAN SEBASTIÁN
Gracias a las gestiones del obispo de Tarazona, Mons. Eusebio Hernández Sola, y a la hospitalidad y diligencia del vicario general de la Diócesis de San Sebastián, D. Juan Mª Olaetxea, los refugiados ucranianos y los voluntarios harán hoy noche en San Sebastián para descansar y reponer fuerzas para continuar mañana con el viaje. Se dividirán en dos grupos que se alojarán en el Albergue La Sirena, donde serán recibidos, y en el Seminario diocesano de San Sebastián.
Los voluntarios partieron de Tarazona hacia Polonia el miércoles, 9 de marzo, y salieron de allí ayer viernes, 11 de marzo, con sesenta personas que recogieron de un campo de refugiados en Varsovia. El viaje de ida lo hicieron cargados de ropa, alimentos y material sanitario que donaron los turiasonenses. En total, tres camiones y nueve furgonetas con dieciseis voluntarios.
OFRECIMIENTO DE LAS INSTALACIONES DIOCESANAS
Hace una semana, el obispo de Tarazona, Mons. Eusebio Hernández Sola, ofrecía las instalaciones diocesanas para acoger a refugiados y desplazados por la guerra de Ucrania. Seguidamente, el Obispado firmaba un convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Tarazona y con la Comarca de Tarazona y el Moncayo por el que las partes se comprometen a tomar las medidas necesarias para ayudar a todas estas personas. En virtud a este acuerdo, el Obispado cede las instalaciones del Seminario y será el encargado de su alojamiento y manutención, mientras que el consistorio coordinará las actuaciones con el Gobierno de Aragón y con las organizaciones no gubernamentales. Los Servicios Sociales, que dependen de la Comarca, serán los que supervisen el desarrollo del programa de colaboración. Asimismo, el Ayuntamiento concederá una subvención al Obispado para sufragar los gastos derivados de la compra de artículos de primera necesidad como alimentos, productos de higiene o de consumo de energía.
