Los actos de la Semana Santa en Huesca se han iniciado este viernes 8 de abril con la lectura del pregón por parte de don Carlos Escribano, en la iglesia de santo Domingo y san Martín, un acto que se había postergado dos años debido a la pandemia y que ha sido recuperado con la presencia del arzobispo de Zaragoza, que ya tendría que haberlo pronunciado en 2020 cuando era obispo de Calahorra y La Calzada-Logroño. Ha estado acompañado por el obispo de la diócesis de Huesca, don Julián Ruiz, el vicario general, don Nicolás López, y autoridades civiles y militares.
El mayordomo primero de la Archicofradía de la Santísima Vera Cruz, José María Río, ha abierto el acto, que ha continuado con la presentación del pregonero a cargo del prior de la Archicofradía, Fernando Altemir. Monseñor Carlos Escribano ha invitado a “todos a salir a la calle” y vivir estos dias de la Semana Santa oscense. Ha ensalzado la labor de la cofradías y les ha recordado “la importancia de vuestra participación activa, en la tarea evangelizadora de la iglesia. Las cofradías y especialmente las de Semana Santa tenéis un precioso desafío que acometer. Valorar y insertar la religiosidad popular en este dinamismo misionero que es uno de los grandes retos que tenemos por delante y que puede ayudaros a vivir con más intensidad vuestra relación con Cristo”.
En la lectura del pregón, el arzobispo de Zaragoza ha querido invitar a todos a participar activamente en la Semana Santa oscense. Ha destacado el valor y la belleza de cada uno de los pasos que procesionan por las calles de la capital altoaragonesa asegurando que las procesiones son lugar de encuentro. Los pasos “son retablos andantes que en sus orígenes muchos calificaban como la Biblia de los pobres y hoy son la Biblia de los alejados”. Tras el pregón se ha distinguido como cofrades de honor a Ana Ciria y Miguel Ángel Gracia, y el primer acto de la Semana Santa de 2022 ha concluido con un concierto del coro Ars Nova dirigido por Conrado Betrán.