El mes de octubre de este año va a ser un momento muy especial para la Iglesia, pues el Papa Francisco ha convocado un mes misionero extraordinario con motivo del centenario de la Carta Apostólica Maximum Illud del Papa Benedicto XV.
La intención de Francisco es alimentar el ardor de la actividad evangelizadora, reavivar la conciencia misionera de toda la Iglesia y recordarnos que vivimos y hemos de vivir en estado permanente de misión. Y quiere el papa que se apoye este mes en cuatro dimensiones:
- En el encuentro personal con Jesucristo, en la Iglesia, en la Eucaristía, en la palabra de Dios, en la oración personal y comunitaria.
- En el testimonio de los santos, los mártires de la misión y los confesores de la fe.
- En la formación misionera basada en la Escritura, en la catequesis, la espiritualidad y la teología.
- Y en la caridad misionera.
Para vivir intensamente este mes misionero extraordinario, nos pueden ayudar cinco consejos que ha ofrecido el obispo de San Sebastián, Mons. Munilla, para ser misioneros en el día a día:
- Priorizar la conversión personal.
- Cultivar la sensibilidad para escuchar las voces de un mundo que gime.
- Hacer nuestro el lema de san Ignacio de Loyola de “En todo amar y servir”, hasta el olvido de nosotros mismos.
- Hablar de Jesús hasta por los poros, sin excluir la lengua.
- Dirigir a Dios, de vez en cuando, con la máxima sinceridad, la pregunta: “Señor, ¿qué quieres de mi?”
El lema de este mes misionero extraordinario es “Bautizados y enviados: la Iglesia de Cristo en misión en el mundo”. El cantautor gaditano Nico Montero le ha puesto música y podemos escucharlo aquí:
