Nuestro obispo, Mons. Vicente Rebollo, se ocupa en su carta a los fieles de este domingo, 8 de septiembre de los cuatro pilares que nos van a ayudar a recorrer este curso: El Plan Diocesano de Pastoral, la asamblea final del Sínodo Universal de los Obispos, el Año Jubilar Universal 2025 y la clausura del Año Jubilar con motivo de los 350 años de las apariciones de Jesús a Santa Margarita María de Alacoque.
Hemos comenzado el mes de septiembre, lo que quiere decir que tenemos por delante un nuevo curso pastoral para desarrollar nuevos proyectos, afianzar los iniciados y para seguir creciendo como comunidad evangelizada y evangelizadora. Nos consideramos evangelizados, y a la vez, necesitamos crecer en ese camino que dura toda nuestra vida. También nos sentimos comunidad evangelizadora que anuncia su fe, la comparte con los que nos rodean y que intenta proponerla a los demás como camino de esperanza. Vivir y transmitir la fe en los tiempos actuales es nuestro compromiso de creyentes al que debemos sentirnos enviados. Cuatro pilares nos ayudan a recorrer este nuevo curso. El Plan Diocesano de Pastoral, la asamblea final del Sínodo Universal de los Obispos, el Año Jubilar Universal 2025 y la clausura del Año Jubilar con motivo de los 350 años de las apariciones de Jesús a Santa Margarita María de Alacoque.
Este curso 2024 2025 es el segundo en el que desarrollamos nuestro Plan Diocesano de Pastoral con el objetivo de “Ser Iglesia que anuncia el Evangelio, celebra la Fe y sirve desde la Caridad”. El pasado 15 de junio, revisamos en el Consejo Diocesano de Pastoral el grado de cumplimiento realizado durante este primer curso de vigencia, constatamos objetivos realizados y otros pendientes; afianzamos la necesidad de seguir trabajando en esta línea para ser evangelizadores. Ahora nos toca hacer una programación realista, concreta, factible y revisable, que nos lleve a caminar juntos como Iglesia Diocesana en nuestro empeño de anunciar el Evangelio a todas las personas.
Durante el mes de octubre se celebrará la segunda parte de la XVI Asamblea General del Sínodo de los Obispos. Este camino sinodal comenzó en octubre del año 2021 y culminará este próximo mes de octubre. Aunque en sentido estricto nos supondrá el fin del proceso sinodal, ya que este camino tiene tres fases, la consulta a los fieles, Iniciada en 2021; el descernimiento por parte de los pastores, octubre de 2023 y 2024; finalmente la fase de realización, de puesta en práctica de todo lo que el espíritu haya sugerido la iglesia durante este camino. Nuestra diócesis ya aportó la reflexión realizada durante los meses de enero hasta abril, ha sido nuestro pequeño grano de arena en esta etapa.
A partir del 29 de diciembre comienzan un Año Jubilar Universal, conmemoramos los 2025 años del nacimiento de Cristo. es un tiempo especial de gracia para todos los creyentes se nos invita a sentirnos “peregrinos de esperanza” Ojalá este año que vamos a preparar con esmero, nos renueve profundamente para que volviendo nuestro corazón al Señor nos unamos más a Él y a los hermanos.
También durante este curso, el 27 de junio, festividad del Sagrado Corazón de Jesús se clausurará el año jubilar con motivo de sus apariciones a Santa Margarita. Puede ser una ocasión propicia para hacer o renovar la consagración al Sagrado Corazón de nuestra Diócesis, nuestras parroquias y nuestras familias.
Pido a María, Nuestra Madre, en su Fiesta de la Natividad, que interceda por nosotros para seguir los caminos del Espíritu, para que este curso sea muy provechoso para cada uno de nosotros y para nuestra Diócesis.
+Mons. Vicente Rebollo.
Obispo de Tarazona
