Cientos de personas acompañaron este Domingo de Ramos la procesión de la Entrada de Jesús en Jerusalén, y antes se llevó a cabo la bendición de los ramos de olivo y las palmas en la Plaza de la Catedral. El obispo de Huesca, don Julián Ruiz Martorell, acompañado por el deán de la catedral, Juan Carlos Barón, se acercó así a las cofradías y a los presentes que llenaron la plaza frente al pórtico de la seo oscense. Muchos de ellos, niños vestidos de hebreos que también acompañaron el paso de la Cofradía de San José y Santa Ana.
El recorrido partió de la plaza y bajó a continuación por la calle Santiago para continuar a continuación por Pedro IV, Plaza de Lizana, Coso Alto, calle Moya, Plaza de Luis López Allué, calle Cuatro Reyes, Ramiro el Monje, Plaza de San Pedro, calle San Salvador, Plaza Arista, calle Las Cortes y de nuevo la Catedral, donde se celebró la eucaristía presidida por don Julián Ruiz Martorell. Por la noche se desarrolló la procesión del Cristo de los Gitanos, con salia a las 22:00 h. desde la Catedral de Huesca.