Niños y niñas de distintas parroquias y colegios (Sta. Emerenciana, Purísima y Santos Mártires, Las Viñas…) han participado en el cuentacuentos organizado desde la Delegación de Misiones de Teruel.
Han podido acercarse a la realidad de jóvenes que, con pocos años más que ellos, han dejado su casa, su familia y amigos y han emprendido un largo viaje para poder conseguir una vida que nosotros ya tenemos desde que nacemos.
Han realizado distintas dinámicas en las que han tenido que preparar su pasaporte, atravesar un desierto y aprender a gestionar el reparto de pequeñas cantidades de agua después de la travesía, cruzar un mar intentando que la patera no se rompiera y que nadie cayera al agua, esconderse en un bosque y enfrentarse a un muro que han sido capaces de transformar en casas de acogida. Para ellos ha sido como un juego donde han podido reír y pasarlo bien, pero al final se han acercado a la situación de los jóvenes que realmente han pasado por todo ello para poder llegar a España.
En definitiva, han hecho un viaje al interior de su corazón para acoger y empatizar con las personas que sufren. Ha sido una bonita experiencia donde se ha hecho real la palabra “dejad que los niños se acerquen a mí”, pues la sencillez, naturalidad y bondad de los niños y niñas que han participado ha supuesto tener esperanza en que un mundo mejor es posible.