Cáritas Aragón ha presentado su Memoria 2023, que muestra su labor de acogida y acompañamiento a las personas más vulnerables. A través de su Memoria, Cáritas quiere poner de manifiesto la apuesta solidaria de miles de aragoneses a favor de la inclusión social y la lucha contra la pobreza como signo de amor por las personas como eje transversal sobre el que se sustenta nuestra misión.
La sucesión de crisis económicas y sociales está abocando a muchas personas a situaciones cada vez más complejas de exclusión social. La pérdida de la función protectora del trabajo, el encarecimiento de la vivienda o la irregularidad administrativa que sufren muchas personas migrantes impide que buena parte de la población aragonesa pueda alcanzar unas condiciones de vida dignas.
No abandonar a nadie a la deriva
En el último año, Cáritas ha invertido en Aragón la cifra record de 16.429.728,39€, que suponen un 4,7% más que el año anterior, en sus diferentes recursos y proyectos en Aragón y en acciones de cooperación internacional. Gracias a estos recursos, Cáritas logró acompañar a 20.668 personas, datos que solo tienen un sentido y una razón de ser: las personas y familias que han demandado el apoyo de Cáritas.
Las realidades en este contexto están desplazando a las personas más vulnerables en el acceso a una vivienda digna. Además, se detectan dificultades en el acceso a herramientas digitales (brecha digital) lo que supone una auténtica traba a la hora de solicitar prestaciones básicas; el agravamiento de determinadas situaciones, en especial de las personas en situación administrativa irregular; o dificultades para alcanzar un empleo digno, en el marco de un mercado de trabajo que no es capaz de asegurar la ocupación y el trabajo digno a un gran porcentaje de población.
Los datos de la Memoria reflejan las graves dificultades que ha supuesto la crisis inflacionaria para muchos hogares. En el programa de Acogida y Asistencia se atendieron en el último año a 12.349 personas, siendo en materia de ayudas económicas para vivienda el mayor porcentaje de las demandas atendidas, en torno al 50% (alquiler, equipamiento, suministros). El aumento de los precios provoca que las familias dediquen una parte mucho mayor de sus ingresos a pagar la vivienda y los gastos esenciales de la misma, lo que provoca el dejar de cubrir otro tipo de necesidades básicas. Las ayudas en materia de gastos básicos como alimentación, ropa, salud, educación fueron otra de las partidas importantes, todas ellas han supuesto para Cáritas una dotación de más de tres millones de euros.
La realidad de exclusión y pobreza que viven las personas que acuden a Cáritas no es coyuntural ni, por tanto, asociada a una crisis puntual, sino estructural y generada por desarrollos sociales y económicos, así como por políticas durante décadas. La compleja situación de las personas requiere de periodos de acompañamiento más prolongados y con una inversión económica mayor. Para ello, es necesario que las políticas sociales sean integrales, que pongan en el centro a las personas y sus derechos y que sean capaces de dar respuesta a una creciente inestabilidad global. Cáritas considera que es urgente seguir avanzando en el diseño de políticas sociales con un enfoque fundamentado en los derechos humanos y alejado de la lógica economicista. Además, insiste en la necesidad de coordinación de las diferentes administraciones y la transversalidad de las políticas sociales, contemplando la multidimensionalidad de las problemáticas.
La Memoria recoge también los datos de las personas que están detrás de toda esta actividad. Gracias a 2.131 personas voluntarias y 339 personas trabajadoras contratadas Cáritas puede estar presente en la práctica totalidad del territorio aragonés.
Por otra parte, la entidad apuesta por la cooperación internacional, con la inversión de 648.725,45€ en diferentes proyectos y ayuda humanitaria con destino a diferentes países.
Una apuesta firme por el empleo y la economía social
La atención de la emergencia social ha sido una prioridad para Cáritas este pasado año, pero no la única. Conscientes de que el empleo es uno de los principales factores de integración, Cáritas volvió a aumentar una vez más los fondos invertidos en programas de Empleo y Economía Social. Con una dotación total de 5.149.442,29€ han participado en los diferentes itinerarios de inserción socio-laboral, centros especiales de empleo y empresas de inserción un total de 2.853 personas de las cuales 582 lograron acceder a un puesto de trabajo.
Cáritas, en su día a día, se topa con muchas personas haciendo grandes esfuerzos por superarse, por aprender, por adquirir nuevas competencias, por superar la brecha digital y por enfrentarse a sus miedos y la multitud de obstáculos que encuentran en su camino. Así la mejora de la tasa de actividad y la disminución del paro a lo largo del año 2023 no se traduce en un aumento de la calidad del empleo, sobre todo en las personas en situación de exclusión social. Es por ello que Cáritas apuesta, en los últimos años, por buscar oportunidades a las personas con perfiles de difícil empleabilidad, promoviendo la economía social y, en concreto, las empresas de inserción y centros especiales de empleo como alternativas empresariales que generen oportunidades para las personas más vulnerables.
Abrimos los ojos a la realidad
Bajo el lema de la campaña de Cáritas “Allí donde nos necesitan. Abrimos camino a la esperanza”, un mensaje cercano a las personas en situación de vulnerabilidad para que sepan que cuentan con Cáritas. Además, pone en valor el testimonio de esperanza que dan los mismos agentes de Cáritas en su labor del día a día en las ciudades, pueblos, barrios de todo Aragón.
Como cada campaña, además de sensibilizar en valores como la solidaridad o la defensa de los derechos de las personas con más vulnerabilidad, Cáritas también anima a toda la ciudadanía a hacer efectivo su compromiso colaborando económicamente con la entidad para seguir haciendo posible su labor.
“Espacio de encuentro y concordia”
El presidente de Cáritas Aragón, Pedro A. Melero, realiza un llamamiento a toda la sociedad: “sumar voluntades para convertir en lugar de encuentro y espacio de concordia el trabajo a favor de los invisibles y descartados, en estos tiempos de preocupante polarización social y de agravamiento de las condiciones de vida de muchas personas, que ven cómo su acceso a derechos básicos sigue siendo muy precario”.
La acción de Cáritas es posible gracias a las personas que no miran para otro lado y apuestan por pasar a la acción. Ellas tienen mucho que ver en las oportunidades que otras personas pueden tener.
Es por ello que Pedro A. Melero quiere agradecer “el gran apoyo” que prestan empresas, instituciones, socios, donantes particulares, voluntarios y Administraciones en la tarea de garantizar la dignidad de todas las personas, la protección de los derechos humanos y el compromiso por la justicia social. “Son muchas las manos que se unen para avanzar en esa tarea. Por ello, quiero agradecer, en nombre propio y en el de Cáritas Aragón, esta suma de compromisos y solidaridad que tejen una red de apoyos sin la que no habríamos podido acompañar en el 2023 a más de veinte mil personas en nuestra comunidad”, palabras del presidente Pedro A. Melero.