Cáritas Diocesana Barbastro Monzón ha presentado la Campaña de Navidad que, con el lema “Esta Navidad, tú tienes mucho que ver. Somos oportunidad. Somos esperanza”, nos invita a sacar a la luz nuestra capacidad de brillar con generosidad para los demás, a través de una mirada, una sonrisa, un gesto sencillo y solidario con el que expresamos que otras personas, otras realidades y acontecimientos que ocurren cerca y lejos de nuestra vida, nos importan de verdad. El obispo, Ángel Pérez, y la delegada diocesana de Caridad, Julia Lirios Tormo, han acompañado a la director de Cáritas Barbastro-Monzón, Amparo Tierz, que ha repasado algunas cifras de las atenciones realizadas este año.
Más de 1000 familias en las diferentes Cáritas parroquiales, más de 180 menores atendidos a nivel educativo desde el programa de Infancia, más de 600 personas en el programa de empleo a través de itinerarios personalizados de inserción y formación ocupacional, y 241 personas insertadas en el mundo laboral… El personal y los voluntarios han realizado más de 500 acompañamientos, a personas y familias que requieren no solo apoyo económico, sino también un fuerte apoyo emocional, para ayudarles a mejorar su calidad de vida y a superar sentimientos de malestar, ansiedad, soledad o frustración. Tierz ha destacado que de las personas atendidas, un 32 por ciento «son irregulares, invisibles para la sociedad, que llaman a nuestra puerta, siendo Cáritas de las pocas instituciones que les ayuda mientras legalizan su situación».
Las cifras, y la atención cercana 24 horas al día y 7 días a la semana, denotan situaciones como la escasez de viviendas y los altos costes en alquileres, lo que lleva a realquileres de habitaciones, y a que varias familias convivan en un mismo piso, hacinadas y en viviendas en condiciones mínimas de habitabilidad. También se da la situación de personas sin contratos de vivienda, sin poder empadronarse, con las dificultades que esto conlleva y sin poder ejercer sus derecho.
En nuestro ámbito más cercano, denuncian, se encuentran personas con enfermedades crónicas o prolongadas en el tiempo, que tardan excesivamente en acceder a los servicios y recursos disponibles por colapso en la gestión; migrantes que acuden afectados psicológica y emocionalmente, tras haber huido de sus países y dejado a sus familias, sin ningún tipo de apoyo; problemas generados por los retrasos de prestaciones públicas y en las demoras de citas a diferentes recursos sociales. Todo ello hace que Cáritas cubra cada vez más necesidades, tales como la vivienda, el pago de alquileres, suministros o mobiliario: el 15% de las ayudas de este año se han destinado a este concepto.
Captación de fondos
La directora diocesana se ha referido «al recorte en las subvenciones públicas y el incremento del gasto en las ayudas que realizamos, que estamos viviendo en estos momentos, nos empuja a lanzar a la sociedad, una invitación expresa a colaborar económicamente para sostener nuestros servicios y proyectos de lucha contra la pobreza.» En este sentido, ha recordado que «la colaboración privada es uno de los pilares que permiten a Cáritas desarrollar su misión y ofrecer oportunidades de vida digna a personas en situación de gran vulnerabilidad. Desde Cáritas Diocesana Barbastro-Monzón, os invitamos a ver la Navidad que no vemos, aquella que permanece oculta tras las luces brillantes y nos impiden ver la sombra de pobreza y soledad de muchos hogares, os invitamos a cambiar la mirada ante tantas personas y familias que viven en pobreza y exclusión.»