La Agencia de Colocación BARMON ha publicado un “Análisis técnico de los retos laborales en la nueva normalidad”, basado en los datos que manejan en la oficina, creada en mayo de 2018. El estudio, coordinado por Cristina Puente y Jana Sanz, concluye que la situación de vulnerabilidad que arrastra el grupo de mujeres con «cargas familiares» de la Agencia, dependiente de Cáritas Barbastro Monzon, va a ver probablemente precarizada su situación. La destrucción de empleo o la inestabilidad que pueden producir los cierres temporales de guarderías, colegios o residencias de mayores agravarán su situación
El trabajo se centra en uno de los colectivos que más problemas tienen para trabajar: las mujeres. «Esta es una crisis que particularmente afecta a la mujer en su faceta de cuidadora», puntualiza Cristina Puente. «No me gusta la expresión ‘carga familiar’, pero sí hay una barrera que afecta de manera especial a la mujer: la falta de apoyos para conciliar la vida laboral y familiar. A esto tenemos que dar una respuesta de forma comunitaria». Porque del desempleo a la economía sumergida, pérdida de derechos laborales y exclusión puede haber un paso.
El impacto de una crisis, recuerda, casi siempre recae en los más desfavorecidos y, a pesar de que la perspectiva no es halagüeña, subraya dos elementos positivos. El que «aún estamos a tiempo de prevenir», interviniendo desde el análisis y el acompañamiento continuo, y que en nuestras manos está la posibilidad de «convertir ese escenario en un escenario mejor». Por eso, y ya a corto plazo, proponen iniciativas que faciliten la conciliación familiar y laboral de estas mujeres. Por ejemplo, redes de voluntarios para ayudar en las tareas de cuidados informales de dependientes y menores, en lo que ya trabajan. Proponen también facilitar, en la medida de lo posible, espacios de encuentro para la generación de redes de apoyo personales a mujeres. Así mismo, concluyen la idoneidad de realizar itinerarios telemáticos mediante llamadas telefónicas con apoyo psicosocial, detección de necesidades, un acompañamiento periódico y la propia inserción laboral.
El estudio tendrá una segunda parte sobre el impacto en el tejido empresarial local, que se publicará en octubre, coincidiendo con la Jornada Mundial por el Trabajo Decente.
El obispo de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez, ha dedicado su última carta pastoral a esta cuestión, animando a un apoyo comunitario y recordando que «La crisis golpea el entramado familiar».
http://www.diocesisbarbastromonzon.org/blog/2020/09/17/la-crisis-golpea-el-entramado-familiar/
