Un año más, a pesar de la dificultades, hemos podido compartir con las comunidades parroquiales de Monreal del Campo, Calamocha, El Poyo del Cid, San Andrés-El Salvador, La Merced-San Julián y algunos grupos de vida de las parroquias, como el de Santa Emerenciana, además de muchas personas en su casa, unidas en la plegaria, la sencilla oración preparada para este tiempo de Adviento que ya termina, guiados de la mano de Juan, el precursor, la voz y el testigo de la Luz.
Nos hemos adentrado en su testimonio, que nos interpela acerca del nuestro y nos compromete a anunciar que está entre nosotros; que el amor, la justicia, la paz y la liberación son realidades que están cerca y que tenemos que mostrar en nuestra vida, allá donde nos sintamos enviados por Él.
Acción Católica de Teruel y Albarracín