El tercero de los documentos históricos que se conserva en nuestro Archivo Diocesano y que queremos presentarles con motivo del Día de los Archivos es la inscripción del pintor Goya, aragonés universal, en uno de los libros sacramentales de la parroquia de San Gil. Y si decimos que Goya «sí existió», es porque algún iluminado -y no de los de la Ilustración- se ha atrevido a decir que era un «personaje ficticio». Pues aquí tienen la primera mención documental a nuestro genio.
Francisco de Goya y Lucientes nació y fue bautizado en 1746 en Fuendetodos (Zaragoza, Campo de Belchite). Su partida de bautismo fue destruida, como el resto del archivo parroquial, en 1936 y se conoce a través de fotografías.
Como les venimos diciendo, el primer documento en el que figura su nombre es el de su confirmación en 1751. El 26 de julio el obispo auxiliar de Zaragoza, Juan Manuel Rodríguez Castañón (citado como Manuel de Castañón), más tarde obispo de Tuy, administró el sacramento a un numeroso grupo de personas. La lista aparece en el libro 4 de matrimonios de dicha parroquia (1724-1772), que comprende también las confirmaciones, en los folios 19-22v, en el f. 22. En el f. 20 aparece el nombre de su hermano Tomás, nacido en Zaragoza en 1739. El padrino fue José Nicolao, beneficiado de San Gil.
