Hasta el próximo 22 de diciembre estará abierto, en la Plaza de España, el tradicional Mercadillo de Navidad de Manos Unidas en Fraga, con una selección de productos navideños casetos y, como seña de identidad, prendas del traje típico fragatino. El viernes 29 de noviembre, el párroco moderador de la Unidad Pastoral, José Huerva, inauguró el mercadillo, en un acto que contó con la presencia del alcalde de Fraga, Ignacio Gramún, y la delegada diocesana de Manos Unidas, Genoveva Buatas.
La responsable de Manos Unidas Fraga, Reyes Ibarz, subraya la labor de las voluntarias, imprescindible para poner a la venta una abanico de productos que atrae cada año a numeroso público y cuya recaudación íntegra se destina al proyecto, este año en Ruanda, de Manos Unidas de Barbastro-Monzón. «Una cosa es abrir las puertas del Mercadillo y otra cosa es todo el trabajo previo que lleva para que pueda ser una realidad», explica.
Buena parte de ese trabajo transcurre entre fogones preparando rosquillas, turrones, mostachones y, este año como novedad, el traje típico fragatino, tanto masculinas como femeninas, para las que buscan telas y cosen todo el año, con colaboradores que confeccionan también alguna prenda. En esta ocasión, además, ponen a la venta una colección de mantones de gran calidad, que pueden adquirirse hasta el día 22 de diciembre.
La delegación diocesana de Manos Unidas Campaña contra el Hambre acomete en 2024 o el proyecto de Apoyo a la Educación Secundaria en Rukara (Ruanda), un internado con 212 alumnas de 16 años de media como beneficiarias directas y 458 alumnos como destinatarios indirectos. Se va a construir un nuevo dormitorio y vallado del recinto, así como la rehabilitación y transformación de dormitorios existentes y servicios sanitarios del Liceo Saint Marcel de Rukara que tiene un total de 458 alumnos (212 niñas y 201 niños internos más 45 externos).
Estas nuevas y renovadas instalaciones permitirán a las 212 alumnas internas disponer de un espacio digno en condiciones de higiene y salubridad básicas, así como garantizar su seguridad. El socio local, con el sacerdote diocesano Abbé Jean Uwizeye al frente, y los beneficiarios participarán con el 12 por ciento del presupuesto total del proyecto que incluye parte del equipamiento necesario (35 literas y 28 armarios), trabajos de construcción y compra e instalación de cisternas. Manos Unidas contribuye con el 88 por ciento en los trabajos de construcción y parte del equipamiento (42 armarios). El proyecto, que se realizará en 12 meses, se inscribe en el ODS nº4 «Educación de Calidad» y nº 5 “Igualdad de Género”