La Universidad San Jorge celebró ayer, 17 de septiembre, el acto solemne de Apertura del curso 2024-2025 en una ceremonia en la que se invistieron a los nuevos doctores de la USJ.
Silvia Carrascal, rectora de la Universidad San Jorge, destacó los 20 años de andadura que “hacen de la Universidad San Jorge y del Grupo San Valero un activo al servicio de Aragón”. Este legado de dos décadas “es la base sobre la que cimentar los proyectos y retos futuros”, ya que, según ha manifestado, “no existe evolución sin adaptación” y, por lo tanto, ha afirmado que la USJ “estará siempre a la vanguardia de la educación superior”. Para ello, ha asegurado que la Universidad trabajará por “la mejora continua de la calidad de la formación a través de nuevas metodologías de enseñanza, y la innovación y tecnología de los espacios; el desarrollo del potencial individual de cada estudiante, situándolo en el centro de la experiencia de aprendizaje; y la formación de grandes profesionales con valores íntegros capaces de hacer un mundo más justo”.
Por su parte, la consejera de Empleo, Ciencia y Universidades del Gobierno de Aragón, Claudia Pérez, declaró que, durante las dos décadas de historia de la USJ, “la institución ha demostrado un compromiso inquebrantable con la excelencia educativa, no solo formando profesionales de alto nivel, sino también contribuyendo de manera sustancial a la sociedad del conocimiento”. Este progreso, destacó, es reflejo de “su dedicación a la innovación, la investigacion y la formación integral” y consolida a la USJ “como un pilar fundamental del panorama educativo aragonés”.
Pedro Baringo, presidente del Grupo San Valero, mencionó tanto a las personas que apostaron por la USJ en sus inicios, como a todas las que han formado parte de su historia. “Nuestra responsabilidad es mejorar y transmitir su legado, valores e ideales, siempre pensando en los alumnos, ya que este proyecto solo tiene sentido pensando por y para ellos”, afirmó.
Para concluir el acto, Carlos Escribano, arzobispo de Zaragoza y gran canciller de la Universidad San Jorge, manifestó que los actuales cambios sociales, tecnológicos y políticos “reclaman una educación de calidad que capacite para el empleo y forje personas íntegras capaces de llevar los avances técnicos hacia un verdadero desarrollo humano integral”. En este sentido, afirmó que la USJ “tiene grabado en su ADN el valor de la educación, de la investigación y del conocimiento al servicio de la sociedad”.
Durante la ceremonia, se invistieron a los nuevos doctores de la USJ en el programa de doctorado de Ciencias de la Salud.