En el día de ayer, 8 de septiembre, la parroquia turolense de Santa Emerenciana acogió la institución de los ministerios de acólito y lector de nuestro seminarista diocesano Isaí Zarza.
La celebración estuvo presidida por nuestro obispo, don José Antonio Satué, quien estuvo acompañado de gran parte del presbiterio diocesano, el rector del Seminario de Zaragoza y por compañeros seminaristas.
«¡Ábrete! Dios nos dirige a todos esta llamada apremiante, este ruego amoroso. Pero hoy resuena especialmente en tu corazón, querido Isaí. ¡Abrete!, porque has experimentado en tu proceso de fe y formación, que sólo podemos crecer cuando nos abrimos a la verdad, a los hermanos, Dios» así animaba a Isaí en su homilía don José Antonio por este paso tan importante que iba a dar.
El acolitado y el lectorado son la actualización de las antiguas «órdenes menores» que recibían solo los candidatos al sacerdocio.
El lector es el encargado de leer la Palabra de Dios en la asamblea litúrgica, instruyendo además a los fieles para recibir los sacramentos. «¡Abrete!, porque para ser lector cualificado de la Palabra de Dios, has de abrir tu sensibilidad y tu inteligencia a esa Palabra viva y eficaz que puede cambiarnos la vida de arriba a abajo» decía don José Antonio.
Por otro lado, el acólito ayuda al diácono y al sacerdote en el altar. De modo extraordinario, distribuye la comunión y expone el Santísimo para la oración, además de instruir a todos los fieles sobre la Eucaristía. «¡Ábrete!, para que tu acercamiento al altar como acólito te acerque más a Cristo.»