La S.I Catedral de Ntra. Sra. de la Huerta ha acogido esta mañana la misa de Domingo de Resurrección. El templo se ha llenado de fieles para celebrar la Resurrección de Jesús y recibir la bendición papal y la indulgencia plenaria que se ha realizado al final de la eucaristía. La celebración ha estado presidida por el obispo de la Diócesis de Tarazona, Mons. Vicente Rebollo, acompañado de varios sacerdotes diocesanos. Las imágenes de Jesús Resucitado y de su Madre han ocupado lugares preferentes en la nave del templo. El alcalde de Tarazona, Tono Jaray, y miembros de la corporación municipal han participado en la Eucaristía, junto a los Hermanos Mayores de las distintas cofradías de la ciudad. El Coro de la Catedral ha interpretado los cantos de la celebración.
«Os invito a compartir la alegría de esta fiesta de la Resurrección de Jesús, la fiesta más grande que tenemos los cristianos. Una alegría que nos debe durar continuamente», ha comenzado su homilía el obispo de Tarazona, después de haber vivido esta semana, «en la que hemos visto a nuestro Señor abandonado, sufrir, pasar por el camino del Calvario y desangrarse en la cruz hasta morir«.
El prelado ha señalado que hemos podido recorrer durante estos días «un camino de los sentidos», el cual nos ha permitido «unirnos en ese dolor de Cristo por el mundo y en su entrega por el mundo». Si hemos recorrido el «camino de la razón», ha proseguido, nos habrá interrogado acerca de por qué ha acabado así «el que ha amasado durante su vida tantos milagros, curando, alimentando, sembrando paz, esperanza, dando palabras de buena nueva. ¿Por qué ha acabado así?». «Con ese interrogante llegamos al camino de la fe. El camino que nos invita a sentir en nuestro interior la Resurrección de Cristo. Nosotros no lo hemos visto, pero lo creemos. Y lo creemos porque tenemos el testimonio de aquellos que han visto a Cristo resucitado», ha señalado el prelado.
«Aquel que predicó y sembró vida siempre, sembró esa fraternidad que nos llamó a creer en el Padre bondadoso, el Padre que nos acompaña siempre, que gracias a su muerte y resurrección ha perdonado nuestros pecados para siempre». Don Vicente ha invitado a los presentes a recorrer el «camino del amor». «Porque nosotros que celebramos esta fiesta, esta Pascua, esta Resurrección de Cristo, el Señor nos encarga dar testimonio de la vida y del amor. Y nos invita, Cristo Resucitado, a que pongamos mucha vida y mucho amor allí donde hay indiferencia, porque esta causa dolor». El prelado ha incidido en que el amor es necesario en nuestra vida para evitar el egoísmo y el individualismo.
Y ha recordado que «el amor siembra fraternidad y felicidad, pero el egoísmo siembra insatisfacción».
«Somos testigos de esta gran noticia, Cristo vive y eso debe cambiar nuestra vida, porque tenemos que sentirnos muy llenos de la esperanza en la vida eterna, de la esperanza por apostar por la vida que Jesús nos ha marcado, que pasó haciendo el bien. Esa vida lleva la Vida con mayúsculas a la que todos tenemos que aspirar«, ha asegurado don Vicente.
«Salgamos llenos de confianza, llenos de la certeza de que el Señor camina a nuestro lado para que así nada y nadie
puede apartarnos de ese amor que ha sembrado en nosotros y luego lo podamos traducir en frutos de mucha vida, de mucha caridad», ha concluído.
Al finalizar la Santa Misa, el obispo de Tarazona ha impartido la bendición papal y la Indulgencia Plenaria. Antes ha tenido unas palabras de agradecimiento para todos los que han hecho posible la celebración de la Semana Santa: Ayuntamiento y cofrades, y también para el Coro de la Catedral, que «con sus cantos nos ayudan a orar».
ENCUENTRO DE JESÚS RESUCITADO Y SU MADRE
Antes de la misa, ha tenido lugar el Encuentro entre Jesús Resucitado y su Madre en la explanada de la Catedral. Organizado por la Cofradía de la Resurrección de Tarazona, que lleva la imagen de Jesús Resucitado, también tomó parte en el acto la Cofradía del Cristo de los Afligidos con la imagen de la Virgen. Ambas cofradías han confluído en la Catedral portando a hombros ambos pasos.
Tras el Encuentro entre Madre e Hijo, y después de cantar una jota, se han soltado varias palomas por la paz.
GALERÍA DE FOTOS DE LA MISA DE RESURRECCIÓN Y DE LA PROCESIÓN DEL ENCUENTRO