Tarazona celebró ayer, 5 de octubre, la festividad de San Atilano, hijo y patrón de la ciudad con una solemne eucaristía en la S.I. Catedral de Tarazona. Las reliquias del santo, delante del Altar Mayor, presidieron la celebración.
La misa estuvo presidida por el obispo de Tarazona, Mons. Vicente Rebollo, acompañado del deán presidente del Cabildo, los canónigos, sacerdotes y el diácono permanente. El prelado pidió por que se solucione con prontitud el problema del agua, que ha afectado a la ciudad y a otras próximas, y que impide que se pueda usar agua del grifo desde hace semanas.
En su homilía, D. Vicente, además de felicitar a los turiasonenses por la fiesta de su patrón, animó a los presentes a estar cerca del Señor, a tener fe en Él, «para poder ser buena noticia para los demás».
La eucaristía fue cantada por el Coro de la Catedral. El alcalde de Tarazona asistió a la celebración junto a miembros de la corporación municipal. El templo se llenó de vecinos de la ciudad que quisieron honrar a su patrón.
LA COFRADÍA DE LA MAGDALENA, PREMIADA
Tras la misa, tuvo lugar en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Tarazona la entrega del reconocimiento público “Ciudad de Tarazona” 2023 a la Cofradía del Santísimo Cristo del Consuelo y de Santa María Magdalena de Tarazona Un reconocimiento que entrega el Ayuntamiento turiasonense cada año y que en esta ocasión ha sido para esta cofradía por sus «actividades y eventos culturales vinculados a la devoción de la Semana Santa de la ciudad, además de una relevante labor social donde han realizado funciones caritativas y benéficas para ayudar a los más necesitados. Todo ello, sumado a la pertenencia de su majestad el Rey Felipe VI como Hermano Mayor de dicha cofradía y la reciente obtención del título de ‘Real’».
En su intervención, el alcalde de Tarazona, Tono Jaray, afirmó que la Semana Santa en la ciudad es un acto de devoción, pero también cultural y colaborativo. “Conseguimos que miles de personas de nuestra ciudad participen en un acto común y también nos permite llevar nuestra ciudad más allá de nuestras fronteras. Es un ejemplo de todo lo que podemos hacer juntos”, destacó Jaray. El alcalde también subrayó que en momentos complicados como el brote de gastroenteritis que afecta a la ciudad desde el pasado 11 de septiembre, la labor de las cofradías ha sido “fundamental”.
Por su parte, la concejal de Cultura del Ayuntamiento de Tarazona, Ana Calvo, recalcó que los valores que conforman a esta cofradía son la promoción de la fe y la promulgación de los valores de solidaridad y amor al prójimo. “La cofradía ha sido un faro de esperanza y consuelo para nuestra comunidad, ha brindado apoyo y aliento en los momentos más difíciles y ha compartido la fe, al igual que no se puede negar su valor histórico de más de 400 años”.
El reconocimiento fue recogido por el Hermano Mayor, José Manuel Llorente Oderiz, quién destacó la ayuda espiritual, corporal y económica que ha brindado durante años la cofradía tanto a nivel local, nacional o internacional a entidades como Centinela, Aspanoa o Pierres, así como como a La Palma o países como Honduras, Nicaragua, Guinea Ecuatorial o a la Misión diocesana de Cochabamba. Asimismo, quiso recordar que la Cofradía se sustenta bajo cuatro pilares: la forma peculiar de entender la Semana Santa portando los pasos al hombro con esfuerzo y sacrificio del Nazareno y Santa María Magdalena, el compromiso de mantener el legado que dejaron cientos de cofrades desde 1618, poder ampliarlo como herencia de los más jóvenes y la dedicación a los demás, en especial, a los más necesitados.
Llorente Oderiz añadió que espera que este premio pueda ser “un estímulo más para seguir tejiendo historia, para continuar trabajando con ganas, esfuerzo e ilusión, haciendo más fuerte el mosaico que conforma la familia de la Cofradía”.
