La Iglesia celebró ayer, solemnidad de la Santísima Trinidad, la Jornada Pro Orantibus. En la Diócesis de Tarazona se rezaron las Vísperas en el Monasterio de San José de las Carmelitas de Maluenda, para los arciprestazgos de Calatayud, Alto y Bajo Jalón, y en el Monasterio de Santa Clara en Borja para los arciprestazgos de Tarazona y el Huecha.
En Broja, las vísperas fueron presididas por el obispo de Tarazona, Mons. Vicente Rebollo Mozos, y un nutrido grupo de sacerdotes, mientras que en Maluenda lo fueron por el Delegado diocesano de Vida Consagrada D. José Manuel Vargas.
En ambas celebraciones, se dieron gracias a Dios por dedicar este día a orar por las que rezan todos los días por nosotros. La presencia de la vida contemplativa en los cinco monasterios de nuestra diócesis fue agradecida por los fieles que se congregaron para rezar ante el Santísimo Sacramento y para seguir invitando a todos a seguir pidiendo por la vida contemplativa y experimentar lo que decía la Santa Madre Teresa: “Quien a Dios tiene nada le falta, solo Dios basta”