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La Diócesis de Tarazona celebra San Pascual Bailón

Diócesis de Tarazona
17 de mayo de 2023

Celebramos hoy en nuestra diócesis la memoria de san Pascual Bailón. Nació en Torrehermosa, pueblo de la Comunidad de Calatayud, el día el 16 de mayo de 1540. Recibió el nombre de Pascual porque ese día era Pascua de Pentecostés y, como era costumbre en las familias, recibió el nombre del santo del día.

Por ese motivo, hoy en su localidad natal se celebrará a las 12.30 horas una procesión en su honor que presidirá nuestro obispo, Mons. Vicente Rebollo, y como patrono de la Adoración Nocturna, muchas parroquias tendrán hoy la Vigilia Eucarística.

San Pascual Bailón, que tuvo el oficio de pastor, es también el patrón de los ganaderos de ovino de la Comarca de Tarazona y el Moncayo. Por este motivo, hoy habrá una Santa Misa en su honor en la iglesia parroquial de San Miguel de Tarazona a las 21.00 horas.

Sus padres eran Martín Baylón e Isabel Yubera, labradores. Desde de los siete y hasta los veinte años vivió en Alconchel de Ariza, pueblo también perteneciente a nuestra diócesis, al servicio de Martín García, como pastor; allí aprendió a escribir y leer de forma autodidacta. Durante todo este período vivió una gran vida espiritual y de devoción, especialmente hacia la Eucaristía; para él era una gran alegría cuando su jefe le permitía ir a Misa, entre semana, y cuando no podía, al oír las campanas que anunciaban la consagración, se arrodillaba adorando al Señor. También hacia la Virgen María, a la que veneraba cuando en la distancia veía la ermita de Nuestra Señora de la Sierra como un pequeño punto blanco en el distante pueblo de Villarroya de la Sierra.

Con 18 años, sigue con su trabajo de pastor, pero esta vez como trashumante por tierra de Levante. Allí conoce a los franciscanos y en Orito, pedanía de Monforte del Cid, provincia de Alicante; tiene una visión de Jesucristo en la Eucaristía. Finalmente, el 2 de febrero de 1564, toma el hábito en Elche.

Como hermano franciscano realizó humildes servicios en distintos conventos, distinguiéndose siempre por su piedad y alegría, además por su ciencia infusa ya que, sin haber realizado estudios, sabía explicar temas de teología. Junto a esto su servicio a los pobres y a sus hermanos. Llegó a realizar algunos milagros.

Murió el 17 de mayo de 1592, fiesta de Pentecostés. Tenía 52 años. Fue beatificado el 19 de octubre de 1618 por el papa Pablo V y canonizado el 16 de octubre de 1690 por Alejandro VIII.

Debido a su amor a la Eucaristía fue declarado patrono de todas las asociaciones y congresos eucarísticos por el papa León XIII, el 28 de noviembre de 1897.

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