El pasado domingo 23 de abril, el barrio de Viver de Vicort se celebró la tradicional procesión y Misa en la fiesta del señor san Jorge. Situado en el inmejorable paisaje de la sierra de Vicort, este enclave (que pertenece al pueblo de Belmonte de Gracián) quedó prácticamente despoblado en los años setenta. Cada año, con motivo de la fiesta del titular de la antigua iglesia, un buen grupo de hijos del pueblo, muchos residentes en Belmonte y Orera, siguen reuniéndose para honrar a san Jorge y disfrutar de un día de hermandad. Aunque sólo se utiliza este día, los antiguos vecinos han sabido cuidar bien de este viejo templo, sencillo pero lleno de recuerdos.
El mismo día, en Belmonte de Gracián, los vecinos de los pueblos de la ribera del río Perejiles celebraron también un día de fiesta con ocasión de san Jorge. Un día de encuentro que cada año se celebra alternando en uno de los pueblos. San Jorge, patrón de Aragón, sigue siendo un enlace fuerte para los hijos de esta tierra.