La Comisión Permanente del Consejo Pastoral Diocesano ha recibido más de 70 respuestas de algo más de un centenar de grupos de la Diócesis de Tarazona. Una gran participación que demuestra la preocupación e interés por el funcionamiento de la diócesis.
Había prácticamente un mes para enviar las hojas de trabajo en las que se debían de plasmar las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades existentes en la Diócesis de Tarazona. En este tiempo, la respuesta ha sido más que satisfactoria para la Diócesis de Tarazona, en general, y para los miembros de la Comisión Permanente del Consejo Pastoral Diocesano, en particular, encargados de realizar una síntesis de las contestaciones. En total, han sido 73 respuestas recibidas de 105 grupos. Esto es así porque, por ejemplo, de las 23 parroquias que han participado algunas de ellas se han unido para mandar una respuesta, como así ha ocurrido también con grupos interparroquiales de Cáritas.
Parroquias, arciprestazgos, delegaciones y secretariados, religiosas de vida activa y consagrada, cofradías, movimientos, grupos sinodales, visitadores de enfermos, Cáritas y personas a modo particular han participado en esta primera fase del Plan Diocesano de Pastoral, que ha servido para conocer en qué estado se encuentra la Diócesis de Tarazona y tener una base para empezar a trabajar en el plan definitivo.
Los miembros de la Comisión Permanente se dividieron los cuatro apartados de la hoja de trabajo -debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades- para sintentizar el contenido. En la síntesis se tuvieron en cuenta las respuestas más repetidas y se constató que las preocupaciones y necesidades son comunes en los distintos grupos.
Con el objetivo general definido, “Ser iglesia que anuncia el Evangelio, celebra la fe y sirve desde la caridad«, se pone en marcha la siguiente fase, la de la realización en sí del Plan Diocesano de Pastoral. Las delegaciones y secretariados se han dividido en cuatro grupos bajo estos ejes ANUNCIAR, SERVIR, COMUNIDAD y CELEBRAR, y a partir del resumen elaborado por la Comisión permanente, cada delegado y responsable de secretariado deberá marcarse tres objetivos específicos indicando los medios a utilizar, quienes serán los responsables de que se lleven a cabo y la temporalización de esa acción. Los objetivos que se señalen deberán ser concretos, cuantificables y que se puedan llevar a cabo. El plazo marcado para enviar este trabajo es el 24 de abril.
La Comisión Permanente redactará un borrador del Plan Diocesano con los objetivos específicos de las delegaciones y secretariados, que será tratado por el Consejo Pastoral en una reunión prevista para final de curso. Es este órgano diocesano el que debe darle el visto bueno para su aprobación definitiva.
NOVEDADES
En este curso, además de la constitución del Consejo Pastoral Diocesano y de la elaboración del Plan Diocesano de Pastoral, se han formado los Consejos Arciprestales en los cinco arciprestazgos de la Diócesis de Tarazona. En estos momentos se están elaborando los estatutos que regularán el funcionamiento de estos consejos.