El 7 y 8 de junio los curas jóvenes de la Diócesis de Zaragoza participaron en unas jornadas de convivencia en la Rioja, junto con el arzobispo de Zaragoza, Mons. Carlos Escribano. En estos días de encuentro y de enriquecimiento mutuo, los 15 sacerdotes visitaron Santo Domingo de la Calzada y la catedral de Santa María de Calahorra.
El párroco de Valdespartera, Antonio Moreno, es uno de los sacerdotes jóvenes que se ordenó de adulto, pero forma parte de esta categoría juvenil. De estos dos días de encuentro, el sacerdote destaca y valora que el Arzobispo les acompañara y califica el encuentro y la convivencia como “maravillosa porque pudieron conversar entre ellos, reírse y compartir experiencias con mucha gente de la Rioja y con peregrinos del Camino de Santiago”.
El sacerdote de Valdespartera explica que estas jornadas permiten «acompañar a los sacerdotes ordenados durante los primeros años del ministerio”. Entre los temas del encuentro, Antonio Moreno explica “la importancia de crear presbiterio con relaciones positivas, de compañerismo, reforzar la formación inicial” para que todos los sacerdotes se conozcan mejor.