Las personas voluntarias y contratadas de Cáritas trabajaron ayer para realizar aportaciones a este proceso sinodal.
La sesión un work coffee, dinamizado por Enrique Marco, facilitó la conversación cálida y nutritiva, sintiéndonos parte de Cáritas, de la iglesia diocesana y universal.
Como dicen desde Cáritas, «las personas participantes de proyectos, voluntarias y contratadas nos sentimos compañeras de viaje en este proceso. Juntas caminamos en esta gran oportunidad para soñar»