El obispo visitó recientemente el centro Joaquín Costa de Valentia en Barbastro, acompañado por su directora, Carmen Plana. Don Ángel se confesó «tocado» tras la jornada en la que conoció de primera mano el servicio que desarrollan los profesionales del centro, así como las instalaciones y actividades que disfrutan los 44 usuarios atendidos por Valentia en la capital del Somontano. Durante la visita, señala el obispo, planearon dos ideas: cómo hacer visibles socialmente a personas tan ignoradas y cómo lograr un voluntariado que posibilitara la mayor integración y autonomía de estos internos.
Centro Joaquín Costa
En el centro Joaquín Costa de Valentia -antigua Atades Huesca- en Barbastro, las personas con un mayor grado de discapacidad intelectual o del desarrollo encuentran un ambiente seguro en el cual disfrutan de distintas actividades y de los cuidados de los profesionales que los atienden. La naturaleza de los usuarios marca el desarrollo de las actividades y la gestión del tiempo en el centro.
