El cardenal Omella presenta las líneas de acción y prioridades pastorales para la Conferencia Episcopal Española (CEE), que llevan por título ‘Fieles al envío misionero‘ y que se prolongarán hasta el final del curso 2024/2025. El documento comienza con una reflexión sobre el modo de realizar el mandato del Señor, «id y anunciad el Evangelio», en la actual sociedad española, a la luz del impulso dado por el papa Francisco para, en modo sinodal, descubrir la voluntad de Dios para este tiempo. Se trata de ofrecer, desde la colegialidad y el discernimiento de la Conferencia Episcopal, a las diócesis españolas y a sus obispos algunas claves del actual contexto, social y eclesial, criterios y líneas de trabajo para impulsar la conversión pastoral, personal e institucional que pide el Santo Padre. Ante los desafíos del cambio de época y el continuo dinamismo de este tiempo, los obispos proponen una dinámica de salida misionera que brota de la alegría de la misericordia y exige conversión pastoral y que debe ser el paradigma de toda la obra de la Iglesia.
La Iglesia vive en permanente fidelidad a un doble mandato, «id y anunciad el Evangelio» y «haced esto en conmemoración». Este mandato que, gracias a la eucaristía acontece hoy, ha de ser vivido en la novedad de cada momento histórico. Claves de las orientaciones pastorales:
1. Ante los desafíos del cambio de época y el continuo dinamismo de este tiempo, los obispos proponen una dinámica de salida misionera que brota de la alegría de la misericordia.
2. Se ha dado un gran cambio social que ha generado una sociedad desvinculada e insegura en la que crece la desconfianza y el enfrentamiento.
3. En este contexto tan transformado, es necesario seguir afirmando que la vivencia religiosa, la fe en Dios, aporta claridad y firmeza a las valoraciones éticas.
4. Esta situación es un momento histórico de fuerte llamada a la renovación para la humanidad y para la Iglesia.
5. La misión evangelizadora de la Iglesia en España se encuentra con dos tipos de dificultades: unas vienen de fuera de la cultura ambiental; otras vienen de dentro, de la secularización interna, la falta de comunión o de audacia misionera.
6. Es motivo de esperanza el testimonio de muchos laicos partícipes activos en la misión de la Iglesia asumiendo funciones y responsabilidades.
7. Esto nos pide salir al encuentro para la escucha y el diálogo y también acoger y generar ámbitos donde escuchar «a los de fuera» y trabajar conjuntamente «con los de dentro».
8. Hemos de hacer este anuncio con audacia y esperanza. Dios nos sale al encuentro, la fe en Dios es razonable y el corazón humano está inquieto y con sed.