Opinión

Jesús Moreno

A pie de calle

Una sencilla letra

17 de febrero de 2021

                Una sencilla letra, un pequeño gesto, una palabra amable… ¡cuánto ayuda a cambiar las cosas!

                En mi escrito de la semana pasada (“Otros también sufren”), en el penúltimo párrafo, escribí: “Cuando NO cuesta compartir dinero, que es lo más fácil, nos estamos diciendo que a nuestra solidaridad le falta no poco”. Y quería escribir: “Cuando NOS cuesta compartir dinero, que es lo más fácil, nos estamos diciendo que a nuestra solidaridad le falta no poco”. Una pequeña diferencia entre las dos frases, pero que cambia totalmente el sentido de lo que quería decir.

                Se trata de una simple, de una sencilla ‘s’: donde debía decir NOS, escribí NO. Cuando no cuesta compartir… no podemos decir que a nuestra solidaridad le falta no poco. Sí podemos decir: cuando nos cuesta compartir… a nuestra solidaridad le falta no poco. Compartir dinero es lo más fácil y si ni eso hacemos, nuestra solidaridad está coja o simplemente no existe. Esa total diferencia… consecuencia de una ‘s’ olvidada.

Esta sencilla equivocación ortográfica me ha traído a la memoria algo mucho más importante y tan contundentemente expresado por el uruguayo Eduardo Galeano en su conocida afirmación: “Mucha gente pequeña en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas pueden cambiar el mundo”.

                Una ‘s’ no colocada, que cambia el sentido de la frase, me ha llevado a mirar más arriba, a pensar más alto: la importancia de lo pequeño en nuestra vida y en el mundo. Así me ha sucedido y así lo expreso.

Todos tenemos la certeza de que el mundo no funciona bien en medio de tantas injusticias, carencias, mal trato, guerras, enemistades, olvidos de los últimos… Y a muchos nos gustaría colaborar en su transformación. Pero… ¿qué puedo hacer yo si no tengo poder, ni influjos, ni posibilidades? Yo, ‘un don nadie’, ¿qué puedo aportar? ¿En qué va a influir mi comportamiento? Y, entonces, nos topamos con Galeano y su afirmación: “Mucha gente pequeña…”.

Y nos topamos también con nuestra responsabilidad personal y con nuestra responsabilidad comunitaria que nadie puede reemplazar. Y descubrimos también que estamos realizando ya pequeños gestos transformadores en nuestra vida, en nuestra casa, en nuestra convivencia, en nuestros grupos, en nuestra comunidad, en nuestra parroquia…

Para avanzar, solo necesitamos despertar la conciencia de que estamos llamados a mejorar este mundo, que todo lo que hacemos, por pequeño que sea, colabora a mejorar este mundo o a dejarlo igual o peor de lo que está. Si hacemos con convicción lo que creemos que ayuda, aunque sea personal, pequeño, insignificante, solitario… se unirá a todo lo que en el mismo sentido están haciendo otros.

Y abrir los ojos de par en par, mirar atentamente a nuestro alrededor y descubrir lo bello y bueno que nos rodea. “No vemos el arco iris, que es efímero, pero llena el mundo de esperanza, porque tenemos nuestra mirada puesta en el suelo. […] No vemos la generosidad de las personas que se dan sin esperar nada a cambio”.[1]

No es lo mismo estrechar una mano lánguida y fofa y con rostro insensible, que sentir un cariñoso y sonriente apretón de manos que acoge y valora. No es lo mismo hacer de las redes sociales un almacén de ofensas, superficialidades, mentiras… que convertirlo en un medio de comunicación positivo, constructivo, verdadero. No es lo mismo acoger con cara de vinagre que con una sonrisa amplia y abierta, cuando teníamos ‘cosas más importantes’ que hacer. No es lo mismo cuidar a un enfermo con atención y delicadeza que tratarlo como un mueble que no sirve para nada. No es lo mismo… Pequeños gestos que transforman nuestro mundo. Una ‘sencilla y humilde s’ que puede cambiarnos.

“Si la gente pudiera ver que el cambio se produce como resultado de millones de pequeñas acciones que parecen totalmente insignificantes, no dudaría en realizar esos pequeños actos”.[2]


[1] Isabel Gómez-Acebo. EVANGELIO 2021. Ciclo B. Pág. sin número: 15 feb 21.

[2] Howard Zinn, (1922-2010) historiador social estadounidense.

Este artículo se ha leído 49 veces.
Compartir
WhatsApp
Email
Facebook
X (Twitter)
LinkedIn

Noticias relacionadas

Este artículo se ha leído 49 veces.