En los conventos, el nacimiento del Hijo de Dios se festeja de una manera especial. En algunos casos, con tradiciones y costumbres centenarias que perduran a lo largo de los siglos. Así ocurre en el convento de San José de las Hermanas Carmelitas Descalzas de Maluenda, en donde las religiosas siguen realizando celebraciones que, en algunos casos, se remontan a su fundación en 1648.
Todas estas tradiciones las ha recogido Jesús Gil Alejandre en su artículo “Navidad en el convento de Carmelitas de Maluenda”, publicado por el Centro de Estudios Bilbilitanos, en el que se detalla en qué consisten las celebraciones y cómo se llevan a cabo.
LOS BELENES, ADVIENTO Y LA BAJADA DEL SANTÍSIMO NIÑO
Una de las costumbres del convento es la colocación del Belén en el coro el 23 de diciembre. Este Belén data del siglo XVII. Además, se monta otro en la iglesia que se puede visitar hasta después de Reyes y, por todo el convento, nos podemos encontrar hasta doce preparados por las monjas con mucho cariño y dedicación. Las hermanas los llaman “brasericos” porque “calientan las frías paredes del convento”. Los Niños Jesús de todos ellos se colocan el día de Nochebuena.
En Adviento, por ejemplo, a la vez que se rifan el santo del mes, cada hermana recibe en una bolita de papel, la ropita o portal que tiene que preparar en ese tiempo. Son frases como «Hágale al Niño Jesús, un colchoncito bien mullido de mansedumbre y dulzura al ejemplo de la Madre y Señora». Esta tradición es una de las más antiguas y, según Gil Alejandre, puede remontarse a la fundación del convento.
La celebración de la Bajada del Santísimo Niño tiene lugar el 21 de diciembre, y consiste en una procesión encabezada por las hermanas más jóvenes que portan al Niño Jesús, la cuna y los aderezos hasta la sacristía, mientras el resto de la comunidad canta villancicos desde sus celdas adornadas. Ese día también se bajan los instrumentos que las religiosas usarán para sus cantos navideños.
NOCHEBUENA Y REYES
El día de Nochebuena, por la tarde, el convento realiza la procesión de la Posada. Una representación en la celda de la Madre Priora, en la que ésta y las hermanas más jóvenes -que encarnan a los Santos Esposos- entablan un diálogo y la Madre ofrece el convento como posada, momento que se vive con mucha alegría. Por la noche, se celebra la Misa del Gallo, uno de los actos más importantes de la Navidad, tras la cual se adora al niño, y la Madre Priora lleva a cabo la Vestición, todo un rito que sigue una dinámica muy específica pues las ropas están colocadas de una manera determinada. Una vez vestido el Niño, las monjas lo besan y lo colocan en la cuna. Después las religiosas se felicitan las pascuas, cantan villancicos y comen turrón. El día de Navidad es día de gran celebración y la Santa Misa es toda cantada.
La víspera del día de Reyes, las hermanas de Maluenda celebran su llegada con villancicos y los desmontan del Belén para llevarlos a adorar al Niño. También les escriben cartas que dejan en un buzón colocado en la oficina de la Madre Priora, quien les hace un pequeño regalo a todas las hermanas, que deja en el refectorio. Además, organizan una especie de amigo invisible que ellas llaman la “Hermana Secreta” el mismo día de Reyes. Durante la mañana, intentando no ser vistas, van colocando sus regalos en el belén de recreación. Tras hacer un sorteo, cada hermana va recogiendo su presente y agradeciéndolo.
El convento de San José de Maluenda cuenta con más tradiciones que las carmelitas han mantenido: las Jornadas -una novena que comienza el 16 de diciembre, en la que van recreando el viaje de los Santos Esposos de Nazaret a Belén, se preparan las prendas de la canastilla del Niño en forma de mortificación, acción u oración y en la que cada día se unen a un coro de ángeles-, la celebración de Nuestra Señora de la Esperanza o el Niño Perdido, que tiene lugar el domingo siguiente a la Epifanía del Señor. Tradiciones centenarias que las carmelitas descalzas de Maluenda han sabido mantener a lo largo de los años.
Las celebraciones aquí referidas se encuentran explicadas y detalladas en el artículo escrito por Jesús Gil Alejandre, “Navidad en el convento de carmelitas de Maluenda”, que está publicado en el TOMO I sección de Etnología, Folklore y Literatura del IX Encuentro de Estudios Bilbilitano, editado por el Centro de Estudios Bilbilitanos. La fotografía también ha sido facilitada por Jesús Gil Alejandre, a quien agradecemos su colaboración para este artículo.
